domingo, 16 de noviembre de 2025

PARADOJA DEL SER

 


"No se dice:

<Soy una contradicción andante>


Se dice:


Soy el mismo que viene de hace siglos, cuando al mismo tiempo ya soy otro, que aquel que fui hace dos instantes.


Soy mi niño, mi adolescente y mi anciano.


Soy el vínculo que tienen mis aspectos heridos con aquellos que están sanos.


Soy el personaje que interpreto y la vida que lo encarna.


Soy el animal con su instinto salvaje.


Soy el espíritu con su paz y su calma.


En mi conviven todas las versiones, de aquellas que me niegan, hasta aquellas que me llevan a expresarme del alma.


Por mis venas viaja el loco, el asesino, el artista y el sabio. En mi cuerpo llevo a mis ancestros con sus experiencias, sus virtudes y sus resabios.

Por mis adentros corren todos con los que tuve relación y que a su manera han sabido tocar mí corazón.


Soy lo que he vivido y lo que no.


¡Soy el otro y soy yo!


Soy creación y soy creador.


<Soy una paradoja caminando hacia el amor>”



Tomás Cuirolo

“Libera el ser





lunes, 3 de noviembre de 2025

30 COSAS QUE DEBES DE DEJAR DE HACERTE A TI MISMO

 


“Cuando dejes de perseguir las cosas incorrectas, estarás permitiendo que te alcancen las adecuadas.” - See more at: http://www.lauraribas.com/30-cosas-que-debes-dejar-de-hacerte-a-ti-mismo/#sthash.lI0vO0MH.dpuf

“Cuando dejes de perseguir las cosas incorrectas, estarás permitiendo que te alcancen las adecuadas.” 


“Cuando dejes de perseguir las cosas incorrectas, estarás permitiendo que te alcancen las adecuadas.” - See more at: http://www.lauraribas.com/30-cosas-que-debes-dejar-de-hacerte-a-ti-mismo/#sthash.lI0vO0MH.dpuf

Como Mary Robinson dijo una vez: “Nadie puede volver atrás y comenzar de nuevo, pero cualquiera puede comenzar hoy mismo y hacer un nuevo final.” Nada podría estar más cerca de la verdad. Pero antes de poder iniciar este proceso de transformación tienes que dejar de hacer las cosas que te han estado deteniendo.

Aquí tienes algunas ideas para comenzar:


1. Deja de gastar el tiempo con las personas equivocadas. La vida es demasiado corta para pasar tiempo con personas que te quitan la felicidad. Si alguien te quiere en su vida, harán espacio para ti. No deberías tener que luchar por un lugar. Nunca, nunca insistas en alguien que constantemente pasa por alto tu valor. Y recuerda, no es la gente que está a tu lado en tu mejor momento, sino los que están a tu lado en tu peor momento, tus verdaderos amigos. Como dijo John Fitzgerald Kennedy: “el éxito tiene muchos padres, pero el fracaso es huérfano”.

2. Deja de huir de tus problemas. Enfréntalos con la cabeza en alto. No, no será fácil. No hay persona en el mundo capaz de manejar a la perfección cada golpe que le arrojan. No se supone que somos capaces de resolver problemas al instante. Así no es como estamos hechos. De hecho, estamos hechos para enojarnos, ponernos tristes, sentir dolor, tropezar y caer. Porque ese es todo el propósito de la vida: enfrentar los problemas, aprender, adaptarse y resolverlos en el transcurso del tiempo. Esto es lo que en última instancia, nos convierte en la persona que llegaremos a ser.

3. Deja de mentirte a ti mismo. Puedes mentirle a cualquiera en el mundo, pero no puedes mentirte a ti mismo. Nuestras vidas mejoran solamente cuando tomamos las oportunidades. Y la primera y más difícil oportunidad que podemos tomar es ser honestos con nosotros mismos.

4. Deja de poner tus propias necesidades en un segundo plano. La cosa más dolora es perderte a ti mismo en el proceso de amar a alguien demasiado (tu pareja, tus padres, tus hijos, tus hermanos) y olvidar que también eres especial. Sí, ayuda a los demás, pero ayúdate a ti mismo también. Si alguna vez hubo un momento para seguir tu pasión y hacer algo que te importe a ti, ese momento es ahora.

5. Deja de intentar ser alguien que no eres. Uno de los mayores desafíos en la vida es ser tú mismo en un mundo que está tratando de hacerte igual a todos. Siempre habrá alguien más guapo, siempre habrá alguien más inteligente, siempre habrá alguien más joven, pero nunca serán tú. No cambies para gustarle a la gente. Sé tú mismo y a las personas correctas les encantará el verdadero tú.

6. Deja de aferrarte al pasado. No puedes comenzar el siguiente capítulo de tu vida si sigues releyendo el último.

7. Deja de tener miedo a cometer un error. Hacer algo y hacerlo mal es por lo menos diez veces más productivo que hacer nada. Cada éxito tiene una estela de fracasos detrás de él y cada fracaso está conduciendo hacia el éxito. Terminas lamentando las cosas que no hiciste mucho más que las cosas que hiciste.

8. Deja de reprenderte por los errores del pasado. Se puede amar a la persona equivocada y llorar por las cosas equivocadas, pero no importa cómo las cosas van mal. Una cosa es segura, los errores nos ayudan a encontrar a la persona y las cosas que son perfectas para nosotros. Todos cometemos errores, tenemos luchas e incluso lamentamos las cosas en nuestro pasado. Pero tú no eres tus errores, no eres tus luchas y estás aquí AHORA con el poder de dar forma a tu día y tu futuro. Cada cosa que ha ocurrido en tu vida te está preparando para un momento que está por venir.

9. Deja de intentar comprar la felicidad. Muchas de las cosas que deseamos son caras. Pero la verdad es que las cosas que realmente nos satisfacen son totalmente gratis: el amor, la risa y el trabajo en nuestras pasiones.

10. Deja de mirar exclusivamente a los demás para ser feliz. Si no estás feliz con lo que eres por dentro, tampoco serás feliz en una relación a largo plazo con alguien. Tienes que crear la estabilidad en tu propia vida antes de poder compartirla con alguien más.

11. Deja de ser inactivo. No pienses demasiado o crearás un problema que ni siquiera estaba allí en primer lugar. Evalúa las situaciones y toma medidas decisivas. No puedes cambiar lo que te rehúsas a confrontar. Avanzar implica un riesgo. ¡Punto! No puedes llegar a la segunda base con el pie en la primera.

12. Deja de pensar que no estás listo. Nadie se siente 100% listo cuando surge una oportunidad. Las oportunidades más grandes en la vida nos obligan a crecer más allá de nuestras zonas de confort, lo que significa que no nos sentiremos totalmente cómodos al principio.

13. Deja de involucrarte en relaciones por las razones equivocadas. Las relaciones deben ser elegidas con prudencia. Es mejor estar solo que estar mal acompañado. No hay necesidad de precipitarse. Y esto se puede trasladar a todo tipo de relación, ya sea personal, laboral o profesional. Si hay algo que está destinado a ser, va a suceder en el momento adecuado, con la persona adecuada y por la mejor razón. Enamórate cuando estés listo, no cuando estés solo.

14. Deja de rechazar nuevas relaciones sólo porque las antiguas no funcionaban. En la vida te darás cuenta de que hay un propósito para todos los que conoces. Algunos te pondrán a prueba, algunos te utilizarán y algunos te enseñarán. Pero lo más importante, algunos sacan lo mejor de ti.

15. Deja de intentar competir contra todos los demás. No te preocupes por lo que otros hacen mejor que tú. Concéntrate en vencer tus propios records cada día. El éxito es una batalla entre tú y tú mismo solamente.

16. Deja de estar celoso de los demás. Los celos son el arte de contar las bendiciones de otra persona en lugar de las tuyas propias. Pregúntate lo siguiente: “¿Qué es algo que yo tengo y que todos los demás quieren?”.

17. Deja de quejarte y sentir lástima por ti mismo. Las curvas de la vida existen por una razón: para cambiar tu trayectoria en una dirección que está destinada para ti. No puedes ver o entender todo lo que ocurre en un momento y puede ser difícil. Sin embargo, reflexiona sobre las curvas negativas lanzadas sobre ti en el pasado. A menudo verás que con el tiempo te llevaron a un mejor lugar, persona, estado de ánimo o situación. Así que ¡sonríe! Que todos sepan que hoy eres mucho más fuerte que ayer, y lo serás.

18. Deja de guardar rencores. No vivas tu vida con odio en tu corazón. Vas a terminar perjudicándote a ti mismo más que a la gente que odias. El perdón no está diciendo: “Lo que me hicieron está bien.”, está diciendo: “Yo no voy a dejar que lo que me hiciste arruine mi felicidad por siempre”. El perdón es la respuesta… deja ir, encuentra la paz, libérate a ti mismo. Y recuerda, el perdón no es sólo para otras personas, es para ti también. Si debes perdonarte a ti mismo, sigue adelante y trata de hacerlo mejor la próxima vez.

19. Deja de permitir que otros te bajen a su nivel. Niégate a bajar tus estándares para dar cabida a aquellos que se niegan a elevar los suyos propios.

20. Deja de perder el tiempo explicando a los demás. Tus amigos no lo necesitan y tus enemigos no van a creer de todos modos. Sólo haz lo que sabes en tu corazón que es correcto.

21. Deja de hacer las mismas cosas una y otra vez sin descanso. El momento para tomar un profundo respiro es cuando no tienes tiempo para ello. Si sigues haciendo lo que estás haciendo, seguirás consiguiendo lo que estás recibiendo. A veces es necesario tomar distancia para ver las cosas con claridad.

22. Deja de pasar por alto la belleza de los pequeños momentos. Disfruta de las pequeñas cosas, porque un día puedes mirar hacia atrás y descubrir que eran las cosas grandes. La mejor parte de tu vida serán los pequeños momentos, aquellos que pasas riendo con alguien que te importa.

23. Deja de intentar hacer las cosas a la perfección. El mundo real no recompensa a los perfeccionistas, premia a las personas que logran terminar las cosas.

24. Deja de seguir el camino de menor resistencia. La vida no es fácil, especialmente cuando se piensa en lograr algo que vale la pena. No tomes el camino más fácil. Haz algo extraordinario.

25. Deja de actuar como si todo está bien si no lo está. Está bien desmoronarse por un rato. No siempre tienes que pretender ser fuerte, y no hay necesidad de demostrar constantemente que todo va bien. No debes preocuparte de lo que piensan los demás. Llora si es necesario. Es saludable derramar tus lágrimas. Cuanto antes lo hagas, más pronto serás capaz de sonreír de nuevo.

26. Deja de culpar a otros por tus problemas. La medida en que puedes alcanzar tus sueños depende de la medida en que tomas la responsabilidad de tu vida. Al culpar a otros de lo que está pasando, niegas tu responsabilidad, le das a otros poder sobre esa parte de tu vida.

27.  Deja de intentar ser todo para todos. Hacerlo así es imposible y al intentarlo sólo te quemarás. Sin embargo, hacer sonreír a una persona puede cambiar el mundo. Tal vez no a todo el mundo, pero sí su mundo. Así que afina tu objetivo.

28. Deja de preocuparte tanto. Preocuparte no te liberará de las cargas de mañana, sino que te alejará de la alegría que tiene el día de hoy. Una forma de comprobar si hay algo sobre lo que vale la pena reflexionar es hacerte la siguiente pregunta: “¿Este asunto importará dentro de un año? ¿Tres años? ¿Cinco años?”. Si no, entonces no vale la pena preocuparse.

29. Deja de centrarse en lo que no quieres que suceda. Concéntrate en lo que sí quieres que suceda. El pensamiento positivo está a la vanguardia de cada gran historia de éxito. Si te despiertas cada mañana con la idea de que algo maravilloso va a suceder en tu vida hoy, y prestas mucha atención, a menudo te darás cuenta de que tienes razón.

30. Deja de ser ingrato. No importa cuán bien o mal lo pasas, despierta cada día agradecido por tu vida. Alguien más en algún lugar está luchando desesperadamente por los suyos. En lugar de pensar en lo que te estás perdiendo, trata de pensar en todo lo que tú tienes y que los demás se están perdiendo.




ORIGINAL POST WRITTEN BY: MARC CHERNOFF
30 Things to Stop Doing to Yourself
Escrito por Cristian Illanes - weikap.com y tomado de: El Arte de Saber Vivir


jueves, 30 de octubre de 2025

LOS PILARES DE LA FELICIDAD


Los Pilares de la Felicidad 


La felicidad no es un estado permanente ni un ideal inalcanzable, sino una práctica diaria basada en tres “pilares” esenciales, el disfrute, la satisfacción y el sentido.

Estos tres elementos forman el esqueleto de la felicidad humana, el aprender a cultivarlos conscientemente puede transformar la manera en que vivimos. Son las cosas en las que debemos fijarnos y mejorar. No se trata de ser feliz todo el tiempo, sino de entender qué alimenta nuestro bienestar y cómo equilibrar esos tres pilares en la vida cotidiana.


El disfrute, está vinculado con los placeres sencillos y con la  capacidad de aprender de lo que ya tenemos. No es el hedonismo sin límites, sino la apreciación consciente de lo que nos rodea como una conversación agradable, un paseo, un buen café o la risa con alguien querido. El disfrute no depende de la suerte, depende de prestar atención.


La satisfacción, por su parte, tiene que ver con la sensación de logro, con el impulso de avanzar y con la alegría que proviene de esforzarse y conseguir algo valioso. Sin embargo, hay que advertir que perseguir la satisfacción por sí sola puede ser engañoso ya que el placer de alcanzar una meta tiende a desvanecerse rápidamente si no se combina con propósito. La satisfacción se alcanza en los pequeños logros de cada día.


El tercer componente, el sentido, es quizás el más profundo. Se refiere a la conexión con algo que trasciende al propio yo como una relación, una vocación, una fe, una causa y que da coherencia a nuestras acciones. El sentido actúa como un hilo conductor que une los momentos de disfrute y satisfacción, dándoles dirección y valor.


Tengamos presente que nadie es excelente en estos tres aspectos de la vida, y eso es algo bueno. La felicidad perfecta, no solo es imposible, sino indeseable. Si no tuviéramos emociones y experiencias negativas, estaríamos muertos. La presencia de dificultades y emociones dolorosas es lo que da contraste a los momentos felices y nos permite valorarlos.


La felicidad perfecta no existe, pero la felicidad real sí, cuando uno busca de forma intencionada estas tres partes de la vida cada día. La clave está en la intención, en reconocer qué área necesita más atención y actuar en consecuencia.


@gantillano




TIENES EL PODER…




Tienes el poder cuando…


  1. No reaccionas, estudias: Observas en lugar de reaccionar, lo que incomoda a las personas porque no pueden predecir tu próximo movimiento.
  2. Puedes herir, pero eliges no hacerlo: Retienes el poder que sabes que tienes, lo que te hace más peligroso que quienes lo usan imprudentemente.
  3. Te has enfrentado a la oscuridad y no te has quebrado: Has sobrevivido a lo que aplastaría a otros, y esa fuerza silenciosa es lo que la gente más teme.
  4. Te sientes cómodo siendo desagradable: No buscas la aprobación, y eso te hace inmune a la manipulación.
  5. Hablas menos, significas más: Cada palabra tiene peso, así que cuando hablas, la gente escucha y lo siente.
  6. Interrumpes a la gente sin previo aviso: Cuando alguien cruza la línea, desapareces. Sin drama. Solo silencio. Esa imprevisibilidad es poder. 
  7. No presumes, cumples: Dejas que los resultados hablen, y esa confianza silenciosa hace ruido por sí sola.
  8. Lees a las personas al instante: Te das cuenta de lo que otros fallan: tono, postura, intención, y te ajustas antes de que se den cuenta.
  9. Eres implacable con los límites: Proteges tu paz como un arma, y cualquiera que la ponga a prueba es cortado rápidamente.
  10. Confías lentamente, observas siempre: No te engañan dos veces porque siempre estás observando bajo la superficie.
  11. Permaneces imperturbable durante el caos: Mientras otros entran en pánico, tú te mantienes concentrado; esa calma bajo presión es intimidante.
  12. No te das explicaciones: Tomas decisiones sin necesidad de validación, y esa certeza inquieta a las mentes débiles.
  13. Mantienes tu círculo cerrado: Permites entrar a muy pocos, y esa selectividad demuestra lo difícil que es ganarse tu confianza.
  14. Puedes permanecer en silencio durante meses: Desaparecer sin decir una palabra no es un castigo, es una estrategia. Regresas más fuerte.
  15. No toleras la falta de respeto, nunca: En el momento en que alguien cruza una línea, lo cierras con firmeza, rapidez y de manera definitiva.
  16. Estás listo para perder a las personas que no se alinean contigo: Prefieres estar solo que rodeado de impostores. Esa valentía es poco común.


@gantillano






martes, 28 de octubre de 2025

BUENOS CONSEJOS

 


QUIEN TE ENFADA TE DOMINA




“Quien te enfada, te domina”

-Buda



Cada vez que reaccionas con rabia, alguien más está al volante. No importa cuán inteligente seas, cuán fuerte, cuán despierto: si te arrastran con un insulto, si te sacan de tu centro con una mirada, entonces no eres libre. Eres marioneta. El que te enfada no necesita golpearte. Le basta con tocar el botón que tu no has aprendido a desactivar. Y tú, creyendo que respondes con fuerza, solo demuestras que no te perteneces. El enojo es el grito del ego que no soporta ser tocado. Y mientras sigas reaccion-ando, seguirás siendo propiedad de quien te pr-ovoca. El verdadero poder está en saber que nadie puede tocar lo que tú no entregas.


¿Qué hacer para evitar ser dominado por el enojo? 


1.- Gestiona tus emociones: Aprende a controlar tus emociones en lugar de dejarlas que te controlen a ti. 
2.- Alejarse y tomar distancia: Cuando sientas que el enojo te domina, aléjate de la situación para poder ganar perspectiva. 
3.- Respira y reflexiona: Tómate un momento para respirar profundamente y reflexionar antes de hablar o actuar. 
4.- No te rebajes al nivel del otro: Si alguien te insulta o difama, no le des el gusto de verte afectado. No permitas que personas tóxicas te quiten tu energía. 


@gantillano